Las esquinas de Mérida

Hace muchos años, en días coloniales, las calles de nuestra ciudad de Mérida lograban confundir a más de uno. Si invitaste tus amigos a un bar o restaurante en la Calle 63 con 62, es posible que nunca llegarían. En aquel tiempo la única manera de dirigir una persona a un destino fue con puntos de referencia, como la Plaza Grande, una iglesia, un monumento, o un parque.

Debido a ello, los dueños de las tiendas y cantinas aprovecharon la oportunidad, y convirtieron sus establecimientos en puntos de referencia. Usando nombres sencillos y fáciles de recordar, como de gente, lugares, eventos, o animales, hicieron estatuas, efigies, o murales representándolos en sus edificios. Dueños de empresas construyeron en esquinas porque eran más fáciles encontrar. Eventualmente la gente de Mérida estaba navegando con estos puntos de referencia en las esquinas.

Sobre los años, la importancia de los puntos de referencia duró más tiempo que los establecimientos que los crearon. Se pintó encima de los murales, y se cayeron las estatuas. Los símbolos para navegar en Mérida tenían peligro de ser perdidos. Gobierno de la ciudad empezó a hacer los señales distintos rojos y blancos que existen en muchas esquinas de hoy. Mientras caminas por la ciudad, puedes descubrir más de 100 placas de las esquinas. Cada una conserva una historia única, ya que vienen a la mente recuerdos de amistades, amores y paseos.

Espero les haya gustado, hasta pronto amigos.